El modelo de utilidad es un tipo de protección legal para las invenciones que proporcionan una solución técnica a un problema específico y que se caracterizan por su novedad, creatividad y aplicabilidad industrial. En el derecho marcario argentino, los modelos de utilidad se regulan en la Ley Nº 24.481, que establece los requisitos y procedimientos para su registro y protección.
Para ser considerado un modelo de utilidad, la invención debe cumplir con ciertos requisitos como ser nueva, tener nivel inventivo (es decir, no ser obvia para una persona con conocimientos en el campo técnico correspondiente) y tener aplicación industrial. Los modelos de utilidad pueden estar relacionados con productos o procesos industriales y deben presentar una ventaja práctica en comparación con las soluciones existentes.
Una vez registrado, el titular del modelo de utilidad tiene derecho exclusivo sobre su explotación comercial durante un período determinado (en Argentina este periodo es de 10 años). Esto implica que ninguna otra persona puede fabricar, vender o utilizar la invención sin autorización del titular. El registro del modelo de utilidad permite al titular obtener indemnizaciones por daños causados por infracciones a sus derechos exclusivos.
En resumen, los modelos de utilidad son una forma importante de proteger las innovaciones técnicas en Argentina y ofrecen a sus titulares la posibilidad de obtener beneficios económicos derivados del uso comercial exclusivo de sus invenciones.